HOTELES BOUTIQUE Y EXPERIENCIAS EN EL LUBERON, EN LA PROVENZA

La Provenza es mucho más que un simple destino de vacaciones. Esta fascinante región, que se mueve a
suave ritmo del sol mediterráneo, ofrece un entorno natural virgen, con una gran diversidad de paisajes
que se despliegan ante el visitante como escenas de una película de Marcel Pagnol. La Provenza es a la
vez misteriosa y agreste, deslumbrante y vibrante: el lugar perfecto para vivir unas vacaciones
memorables para el cuerpo y el alma.

La Provenza es mucho más que un simple destino de vacaciones. Esta fascinante región, que se mueve a suave ritmo del sol mediterráneo, ofrece un entorno natural virgen, con una gran diversidad de paisajes que se despliegan ante el visitante como escenas de una película de Marcel Pagnol. La Provenza es a la vez misteriosa y agreste, deslumbrante y vibrante: el lugar perfecto para vivir unas vacaciones memorables para el cuerpo y el alma.

¿QUÉ TIENE DE ESPECIAL EL LUBERON?

Situado entre Aviñón y Aix-en-Provence, el Luberon encarna la auténtica esencia del sur de Francia. Los
paisajes de postal invitan a relajarse y saborear cada momento, ya sea tomando una copa de vino rosado al
aire libre, durmiendo una siesta con el sonido de las cigarras de fondo o paseando sin prisa a la sombra de
los plátanos... Lejos del bullicio, descubrirá el ritmo de las distintas estaciones: los vivos colores de la
lavanda en verano dan paso a los ocres resplandecientes del otoño; la sinfonía vibrante de la primavera a
la apacible claridad del invierno. Pasee tranquilamente por los pueblos del Luberon y déjese hechizar por
las contraventanas de colores, los tejados rústicos y la simpatía de sus habitantes.
Descubra una tierra que despierta los sentidos y transmite sosiego.

Situado entre Aviñón y Aix-en-Provence, el Luberon encarna la auténtica esencia del sur de Francia. Los paisajes de postal invitan a relajarse y saborear cada momento, ya sea tomando una copa de vino rosado al aire libre, durmiendo una siesta con el sonido de las cigarras de fondo o paseando sin prisa a la sombra de los plátanos... Lejos del bullicio, descubrirá el ritmo de las distintas estaciones: los vivos colores de la lavanda en verano dan paso a los ocres resplandecientes del otoño; la sinfonía vibrante de la primavera a la apacible claridad del invierno. Pasee tranquilamente por los pueblos del Luberon y déjese hechizar por las contraventanas de colores, los tejados rústicos y la simpatía de sus habitantes. Descubra una tierra que despierta los sentidos y transmite sosiego.

Paisaje del Luberon

RAZONES PARA VISITAR ESTA REGIÓN

Cada rincón de esta región bañada por el sol esconde tesoros naturales y culturales que aguardan a ser
descubiertos. De Gordes a Cucuron, de Roussillon a Ansouis, cada pueblo revela su carácter distintivo a
medida que la luz cambia a lo largo del día. Algunos están entre los pueblos más bellos de Francia,
mientras que otros dejan ver su lado mágico a su propio ritmo. El paisaje varía de un pueblo a otro:
acantilados ocres, bosques de cedros, hileras de viñedos, arboledas tranquilas, colinas escarpadas y
campos de lavanda, entremezclados con lugares insólitos como las minas de Bruoux y el Colorado
Provenzal, donde los visitantes pueden perderse en la espectacular belleza de las canteras de ocre
centenarias. La vida de los pueblos de esta tranquila región se ve animada por la celebración de mercados
semanales, donde los productos madurados al sol y la cálida hospitalidad local reflejan la verdadera
esencia del lugar.

El Luberon es también una región vinícola de renombre, que alberga numerosas fincas
donde podrá degustar vinos excepcionales y conocer a los expertos y apasionados viticultores que los
elaboran. A lo largo del año, hay numerosos eventos que muestran el Luberon en todo su esplendor.
Festivales de música y teatro, como el Yeah! de Lourmarin, el Insane de Apt, el Festival Internacional de
Piano de la Roque d'Anthéron o el Festival de Aviñón, así como fiestas de la lavanda, de la trufa o de la
vendimia.


Las razones para visitar esta joya de la Provenza y disfrutar del estilo de vida cálido y auténtico del
Luberon son innumerables, sea cual sea la estación.

Cada rincón de esta región bañada por el sol esconde tesoros naturales y culturales que aguardan a ser descubiertos. De Gordes a Cucuron, de Roussillon a Ansouis, cada pueblo revela su carácter distintivo a medida que la luz cambia a lo largo del día. Algunos están entre los pueblos más bellos de Francia, mientras que otros dejan ver su lado mágico a su propio ritmo. El paisaje varía de un pueblo a otro: acantilados ocres, bosques de cedros, hileras de viñedos, arboledas tranquilas, colinas escarpadas y campos de lavanda, entremezclados con lugares insólitos como las minas de Bruoux y el Colorado Provenzal, donde los visitantes pueden perderse en la espectacular belleza de las canteras de ocre centenarias. La vida de los pueblos de esta tranquila región se ve animada por la celebración de mercados semanales, donde los productos madurados al sol y la cálida hospitalidad local reflejan la verdadera esencia del lugar.

El Luberon es también una región vinícola de renombre, que alberga numerosas fincas donde podrá degustar vinos excepcionales y conocer a los expertos y apasionados viticultores que los elaboran. A lo largo del año, hay numerosos eventos que muestran el Luberon en todo su esplendor. Festivales de música y teatro, como el Yeah! de Lourmarin, el Insane de Apt, el Festival Internacional de Piano de la Roque d'Anthéron o el Festival de Aviñón, así como fiestas de la lavanda, de la trufa o de la vendimia.

 Las razones para visitar esta joya de la Provenza y disfrutar del estilo de vida cálido y auténtico del Luberon son innumerables, sea cual sea la estación.

Pueblo de Gordes

¿QUÉ TIENE DE ESPECIAL EL LUBERON?

LAS MINAS DE OCRE DE BRUOUX

Las minas de ocre de Bruoux, en Gargas, ofrecen un refrescante refugio frente al calor estival. Con una temperatura constante de 10 °C durante todo el año, los 40 kilómetros de esta red de galerías subterráneas desvelan el fascinante mundo del ocre. Ya desde la espectacular entrada, con sus paredes de color ámbar excavadas en la roca, esta cantera histórica, una de las pocas que quedan en Europa, ofrece una experiencia sorprendente y estimulante a visitantes de todas las edades.

FORÊT DES CÈDRES

Este majestuoso bosque de cedros de 250 hectáreas en Bonnieux, situado a 700 metros de altitud, permite escapar del calor en verano y respirar aire puro durante todo el año. Plantado en 1862 con semillas de las montañas del Atlas Medio, el bosque alberga cedros azules del Atlas, robles y bojes, creando un espectáculo impresionante. Las fragancias del bosque y las vistas sobre el Luberon, el valle del Durance y los Alpilles son un auténtico festín para los sentidos.

LAS MINAS DE OCRE DE BRUOUX

Las minas de ocre de Bruoux, en Gargas, ofrecen un refrescante refugio frente al calor estival. Con una temperatura constante de 10 °C durante todo el año, los 40 kilómetros de esta red de galerías subterráneas desvelan el fascinante mundo del ocre. Ya desde la espectacular entrada, con sus paredes de color ámbar excavadas en la roca, esta cantera histórica, una de las pocas que quedan en Europa, ofrece una experiencia sorprendente y estimulante a visitantes de todas las edades.

FORÊT DES CÈDRES

Este majestuoso bosque de cedros de 250 hectáreas en Bonnieux, situado a 700 metros de altitud, permite escapar del calor en verano y respirar aire puro durante todo el año. Plantado en 1862 con semillas de las montañas del Atlas Medio, el bosque alberga cedros azules del Atlas, robles y bojes, creando un espectáculo impresionante. Las fragancias del bosque y las vistas sobre el Luberon, el valle del Durance y los Alpilles son un auténtico festín para los sentidos.

Forêt des Cèdres

CHÂTEAU DE LOURMARIN

El castillo de Lourmarin fue el primer castillo renacentista de la Provenza. Situado frente al pueblo, es una elegante residencia gótica del siglo XV que cuenta con un ala renacentista del siglo XVI. El castillo fue restaurado en el siglo XX por Robert Laurent-Vibert y hoy alberga colecciones de arte y ofrece residencias artísticas.

ABBAYE DE SÉNANQUE

Enclavada en un pequeño valle del Luberon, la abadía de Sénanque es una obra maestra de la arquitectura románica. Fue fundada en 1148 por monjes cistercienses, que todavía hoy viven allí. La silueta clásica de la abadía se integra a la perfección en el paisaje de campos de lavanda, prometiendo un remanso de paz y contemplación.

CHÂTEAU DE LOURMARIN

CHÂTEAU DE LOURMARIN

El castillo de Lourmarin fue el primer castillo renacentista de la Provenza. Situado frente al pueblo, es una elegante residencia gótica del siglo XV que cuenta con un ala renacentista del siglo XVI. El castillo fue restaurado en el siglo XX por Robert Laurent-Vibert y hoy alberga colecciones de arte y ofrece residencias artísticas.

ABBAYE DE SÉNANQUE

Enclavada en un pequeño valle del Luberon, la abadía de Sénanque es una obra maestra de la arquitectura románica. Fue fundada en 1148 por monjes cistercienses, que todavía hoy viven allí. La silueta clásica de la abadía se integra a la perfección en el paisaje de campos de lavanda, prometiendo un remanso de paz y contemplación.

CHÂTEAU DE LOURMARIN

Gordes Lavanda

LA FILAVENTURE, L’ISLE-SUR-LA-SORGUE

Una visita al museo La Filaventure de L'Isle-sur-la-Sorgue le transportará al mundo sensorial de las fibras nobles y le permitirá admirar el arte de los hábiles trabajadores de la lana. Este museo interactivo, fundado por la familia Brun de Vian-Tiran, rinde homenaje a la belleza de los más exquisitos tejidos y a la maestría de un oficio extraordinario. Ubicado en un antiguo molino, el museo combina hábilmente el patrimonio textil y la innovación.

CAVES DU PALAIS SAINT-FIRMIN, GORDES

Bajo las calles de Gordes se esconde un fascinante mundo subterráneo excavado en la roca durante la Edad Media: las bodegas del palacio de Saint-Firmin. Estos espacios semisubterráneos, que antiguamente se utilizaban como talleres y almacenes, son reflejo de una rica tradición artesanal. Tras una cuidada renovación, las bodegas del palacio Saint-Firmin ofrecen a los visitantes la oportunidad de sumergirse en la historia de un lugar excepcional.

LA FILAVENTURE, L’ISLE-SUR-LA-SORGUE

Una visita al museo La Filaventure de L'Isle-sur-la-Sorgue le transportará al mundo sensorial de las fibras nobles y le permitirá admirar el arte de los hábiles trabajadores de la lana. Este museo interactivo, fundado por la familia Brun de Vian-Tiran, rinde homenaje a la belleza de los más exquisitos tejidos y a la maestría de un oficio extraordinario. Ubicado en un antiguo molino, el museo combina hábilmente el patrimonio textil y la innovación.

CAVES DU PALAIS SAINT-FIRMIN, GORDES

Bajo las calles de Gordes se esconde un fascinante mundo subterráneo excavado en la roca durante la Edad Media: las bodegas del palacio de Saint-Firmin. Estos espacios semisubterráneos, que antiguamente se utilizaban como talleres y almacenes, son reflejo de una rica tradición artesanal. Tras una cuidada renovación, las bodegas del palacio Saint-Firmin ofrecen a los visitantes la oportunidad de sumergirse en la historia de un lugar excepcional.

Las minas de ocre de Bruoux

EL JARDÍN DE PLANTAS TINTÓREAS DEL CHÂTEAU DE LAURIS

El Jardin Conservatoire des Plantes Tinctoriales ofrece vistas al valle del Durance desde las terrazas del castillo de Lauris. Es el único jardín botánico de Europa dedicado a las plantas tintóreas. Reconocido como Jardin Remarquable («jardín notable»), el espacio permite a los visitantes sumergirse en una exhaustiva exploración de las plantas, el arte y el patrimonio cultural.

VILLAGE DES BORIES, GORDES

Muy cerca de Gordes se encuentra el Village des Bories, una aldea de construcciones de piedra en seco que atestigua el ingenio rural y el pasado agrícola del Luberon. Este lugar excepcional, declarado monumento histórico, permite a los visitantes adentrarse en el pasado y ser testigos de cómo la artesanía tradicional convive en perfecta armonía con la naturaleza.

EL JARDÍN DE PLANTAS TINTÓREAS DEL CHÂTEAU DE LAURIS

El Jardin Conservatoire des Plantes Tinctoriales ofrece vistas al valle del Durance desde las terrazas del castillo de Lauris. Es el único jardín botánico de Europa dedicado a las plantas tintóreas. Reconocido como Jardin Remarquable («jardín notable»), el espacio permite a los visitantes sumergirse en una exhaustiva exploración de las plantas, el arte y el patrimonio cultural.

VILLAGE DES BORIES, GORDES

Muy cerca de Gordes se encuentra el Village des Bories, una aldea de construcciones de piedra en seco que atestigua el ingenio rural y el pasado agrícola del Luberon. Este lugar excepcional, declarado monumento histórico, permite a los visitantes adentrarse en el pasado y ser testigos de cómo la artesanía tradicional convive en perfecta armonía con la naturaleza.

Village des Bories

LOS HOTELES BOUTIQUE DE BEAUMIER EN LA PROVENZA

Sea cual sea el motivo que le lleve al sur de Francia, los excepcionales hoteles de Beaumier en la
Provenza ofrecen distintos estilos para adaptarse a todos los gustos. Cada hotel tiene su propio carácter
distintivo, que fusiona un patrimonio arquitectónico perfectamente conservado y un marco natural
impresionante.
Tres establecimientos, tres entornos y una misma invitación: desconectar de todo.

LE MOULIN, LOURMARIN

Enclavado en el corazón de Lourmarin, uno de los pueblos más bellos de Francia, Le Moulin es el lugar ideal para empaparse del estilo de vida provenzal. Ubicado en una almazara del siglo XVIII, el hotel combina a la perfección encanto histórico y elegancia contemporánea. Situado junto a galerías de arte, cafés con terraza y el mercado semanal, Le Moulin es el punto de partida perfecto para explorar Lourmarin a pie, a través de sus animadas calles y plazas sombreadas. El tranquilo interior de este hotel Beaumier muestra una visión íntima y atemporal de la Provenza.

Sea cual sea el motivo que le lleve al sur de Francia, los excepcionales hoteles de Beaumier en la Provenza ofrecen distintos estilos para adaptarse a todos los gustos. Cada hotel tiene su propio carácter distintivo, que fusiona un patrimonio arquitectónico perfectamente conservado y un marco natural impresionante. Tres establecimientos, tres entornos y una misma invitación: desconectar de todo.

LE MOULIN, LOURMARIN

Enclavado en el corazón de Lourmarin, uno de los pueblos más bellos de Francia, Le Moulin es el lugar ideal para empaparse del estilo de vida provenzal. Ubicado en una almazara del siglo XVIII, el hotel combina a la perfección encanto histórico y elegancia contemporánea. Situado junto a galerías de arte, cafés con terraza y el mercado semanal, Le Moulin es el punto de partida perfecto para explorar Lourmarin a pie, a través de sus animadas calles y plazas sombreadas. El tranquilo interior de este hotel Beaumier muestra una visión íntima y atemporal de la Provenza.

Le Moulin Terasse

LE GALINIER, LOURMARIN

A las puertas de Lourmarin, Le Galinier ofrece una experiencia totalmente diferente: alojarse en una bastida tradicional en el corazón de la verde y tranquila campiña. Esta casona del siglo XVIII, magníficamente restaurada y rodeada de árboles, ofrece un entorno tranquilo para volver a conectar con la naturaleza. Aquí encontrará un hogar cálido y familiar, perfecto para leer a la sombra, echar una siesta entre los frescos muros centenarios de piedra, jugar a la petanca o practicar yoga bajo el tejo centenario.

LE GALINIER, LOURMARIN

A las puertas de Lourmarin, Le Galinier ofrece una experiencia totalmente diferente: alojarse en una bastida tradicional en el corazón de la verde y tranquila campiña. Esta casona del siglo XVIII, magníficamente restaurada y rodeada de árboles, ofrece un entorno tranquilo para volver a conectar con la naturaleza. Aquí encontrará un hogar cálido y familiar, perfecto para leer a la sombra, echar una siesta entre los frescos muros centenarios de piedra, jugar a la petanca o practicar yoga bajo el tejo centenario.

La Galinier

CAPELONGUE, BONNIEUX

En lo alto de la meseta de Claparèdes, con vistas al pueblo de Bonnieux, Capelongue proporciona una de las vistas más hermosas del Luberon. Esta aldea renovada ofrece un elegante refugio en medio de la campiña provenzal. Piedras antiguas, luz dorada, jardines perfumados y senderos bordeados por flores: esta es la esencia de la Provenza.

CAPELONGUE, BONNIEUX

En lo alto de la meseta de Claparèdes, con vistas al pueblo de Bonnieux, Capelongue proporciona una de las vistas más hermosas del Luberon. Esta aldea renovada ofrece un elegante refugio en medio de la campiña provenzal. Piedras antiguas, luz dorada, jardines perfumados y senderos bordeados por flores: esta es la esencia de la Provenza.

Capelongue hotel