El cuerpo y la mente van de la mano. Por eso es esencial cuidar de ambos, ya sea en el spa, en la tranquilidad de su habitación o en nuestros bares y restaurantes. Y por supuesto, en el exterior, en plena naturaleza, con una aventura deportiva, cultural o contemplativa. Sea cual sea la escapada de su elección, nuestros atentos equipos diseñarán una experiencia a su medida. Pura felicidad.

El cuerpo y la mente van de la mano. Por eso es esencial cuidar de ambos, ya sea en el spa, en la tranquilidad de su habitación o en nuestros bares y restaurantes. Y por supuesto, en el exterior, en plena naturaleza, con una aventura deportiva, cultural o contemplativa. Sea cual sea la escapada de su elección, nuestros atentos equipos diseñarán una experiencia a su medida. Pura felicidad.

EL SPA

CONECTAR

Construido desde cero, el spa del Grand Hotel Beldevere está cobijado entre sus dos edificios. Este espacio brutalista de cemento es una expresión minimalista del renacer frente al Jungfrau. Esa sensación lo atraviesa tdoo: la sauna, el baño turco, la cabina de tratamientos y las piscinas interiores y exteriores, a imagen y semejanza de los baños onsen japoneses. Un destino en sí mismo.

Construido desde cero, el spa del Grand Hotel Beldevere está cobijado entre sus dos edificios. Este espacio brutalista de cemento es una expresión minimalista del renacer frente al Jungfrau. Esa sensación lo atraviesa tdoo: la sauna, el baño turco, la cabina de tratamientos y las piscinas interiores y exteriores, a imagen y semejanza de los baños onsen japoneses. Un destino en sí mismo.

EL DESPORTE

DE PUERTAS ADENTRO

La naturaleza le invita a reconectar con toda su magnificencia. No importa si es invierno o verano: el entorno de nuestros hoteles es inolvidable en cualquier época del año. Explore los senderos cubiertos de nieve, haga una excursión por los glaciares, medite entre la frondosa vegetación, monte en bicicleta a lo largo del valle o, simplemente, sumérjase en nuestros jardines y bosques... Saboree la vida con los cinco sentidos al vibrante ritmo de la región.

La naturaleza le invita a reconectar con toda su magnificencia. No importa si es invierno o verano: el entorno de nuestros hoteles es inolvidable en cualquier época del año. Explore los senderos cubiertos de nieve, haga una excursión por los glaciares, medite entre la frondosa vegetación, monte en bicicleta a lo largo del valle o, simplemente, sumérjase en nuestros jardines y bosques... Saboree la vida con los cinco sentidos al vibrante ritmo de la región.